Algunas personas toman la calvicie como un hecho inevitable en la vida y no tienen demasiado problema en asumirlo. Sin embargo,
son muchas más las personas que sufren ansiedad y depresión, a raíz de la
caída de cabello.
Si la Alopecia te está causando problemas, si los tratamientos fallan o no funcionan como esperabas, ¿qué harás si la situación
continúa empeorando? Desde el punto de vista psicológico, ¿cómo enfrentarás la situación?
Tal vez no sea tu situación, pero para muchas personas es inaceptable el hecho de quedarse calvos. A nadie le gusta perder el cabello,
especialmente en un mundo donde tiene demasiada importancia la superficialidad y la estética.
Algunos sentimos que aparentamos más edad de la que tenemos, solamente porque no tenemos cabello o porque no tenemos suficiente cabello.
Otros pueden aceptarlo pero jamás vuelven a sentirse a gusto con su nueva apariencia. Y en los casos más severos, llegan a cambiar su
estilo de vida exclusivamente por este problema.
La Alopecia es algo que nadie quisiera sufrir. La gente que no tiene el problema, desconoce el impacto que puede tener sobre uno mismo.
Tengamos en cuenta que hay personas que la sufren de tal forma, que llegan a recluírse, no querer salir o sociabilizar, porque
sencillamente no logran sentirse a gusto con su nueva apariencia.
La mayoría de las personas no reconoce públicamente la importancia que le da al problema. Algunos creen
que la Alopecia es irreversible, entonces deciden -socialmente- restarle importancia cuando en realidad en muchos momentos
desearían recuperar su antigua apariencia.
En la Alopecia no existen estratos sociales que sufran menos que otros. Las personas famosas que tienen que posar frente a una cámara,
no solamente se ven afectadas psicológicamente sino que hasta profesionalmente puede cambiarles la vida. Quien trabaje en una oficina
puede sentir una autoestima baja al verse diferente a sus compañeros.
Los adolescentes que todavía concurren a la escuela o universidad, pueden sentirse disminuídos frente al sexo opuesto o incómodos
cuando son los únicos calvos del grupo. Ya vemos que tampoco es exclusivo de una edad o estrato social.
A pesar de todo, está socialmente «aceptado» que los hombres nos quedemos calvos. Existen cientos de ejemplos donde una cabeza
despoblada es incluso atractiva. Andre Agassi sufre el mismo problema que todos nosotros y sin embargo decidió rasurar
por completo su cabellera. No parece muy descontento con su imagen.
A Phil Collins no le afectó en lo más mínimo la pérdida del cabello (aunque en la foto lo disimule), y no hablemos de Sean Connery, que el sexo opuesto lo
considera muy atractivo a pesar de ser calvo.
Como podemos ver, muchos hombres le restan importancia al asunto y siguen con sus vidas sin verse afectados en ningún sentido. Y lo
mejor del asunto es que verdaderamente no les afecta. Aunque te cueste creerlo, es más una cuestión de actitud que de estética.
Ahora tomemos el caso de las mujeres. Para ellas es una verdadera causa de depresión y en algún sentido, tienen más derecho que los hombres.
Socialmente no está aceptado que la mujer pueda quedarse calva. Si jamás has visto alguna, es porque ellas definitivamente
hacen algo al respecto. Un tratamiento que funcione rápido o un aplique o peluca, pero dificilmente veas una mujer calva por la calle.
Desafortunadamente para ellas, los tratamientos no abundan. Los hombres tienen muchas opciones para
combatir la calvicie,
especialmente si comienza a tratarse en sus primeros estadíos.
Si bien existen casos donde el Finasteride no funciona,
para la inmensa mayoría de los hombres es una solución casi garantizada si se comienza en los primeros años de Alopecia.
Las mujeres no tienen una opción tan fuerte, ellas no tienen un Propecia
femenino. Existen lociones y tópicos que funcionan medianamente bien, pero ningún tratamiento puede compararse con la efectividad
de aquellos exclusivos para hombres.
Por fortuna, ellas tienen menor tendencia a la Alopecia y la forma en que se desarrola es muy diferente a la del hombre. En las mujeres,
el cabello se torna más fino y en algunos casos pueden quedar áreas del cuero cabelludo al descubierto.
Si eres hombre o mujer y reconoces que la Alopecia está afectando tu vida, sin lugar a dudas deberías consultar un profesional. Y no
hablamos de un cirujano profesional sino de un psicólogo que pueda ayudarte a elaborar mejorar la situación. Quizá después quieras iniciar
un tratamiento o tal vez ya no te afecte, pero es importante que puedas continuar normalmente tu vida, con o sin cabello.
Si te tomas un momento y recapacitas, te darás cuenta que verdaderamente la Alopecia no es tan grave. Es cierto, puede afectarte
estéticamente o físicamente, pero te aseguro que es mucho peor como tu te ves a como te ven los demás.
Tenemos la capacidad de encontrar defectos en nosotros mismos que otros ni siquiera perciben. Cuando nos miramos a un espejo,
lo primero que hacemos es buscar esa pequeña impefección que no nos gusta.
¿Es realmente tan importante? En el momento que nos afecta, es importantísimo. Cuando logramos ver el problema desde un lugar
más amplio, solemos aceptarlo y reirnos de nosotros mismos.
Si tienes alguna duda o quieres conocer más gente en tu misma situación, no dejes de visitar el
Foro de Calvicie y Alopecia. Seguramente podrás contarnos lo que te sucede ya que muchos
hemos pasado por una situación similar a la tuya.
Recuerda que nunca debes comenzar un tratamiento sin consultar previamente a un profesional.
Muchos hombres pierden su autoestima (o parte de ella) cuando la Alopecia parece no tener solución. Otros pocos sencillamente
lo asumen y no piensan más en ello.
Las mujeres tienen una menor tendencia a la Alopecia, pero el impacto psicológico suele ser más fuerte que en los hombres
y algunas llegan a profundas depresiones.
No importa si eres hombre o mujer, en caso que la caída de cabello te afecte
al punto de cambiar tu comportamiento en sociedad, no descartes la posibilidad de consultar un terapeuta.
Andre Agassi
Podemos ver a Andre Agassi, que parece más contento ahora que cuando tenía cabello. Hay que reconocer que el tenista es un profesional
en la cancha y jamás lo veremos indeciso al buscar una pelota. Con respecto al peinado que usaba,
podemos discutirlo.
Phil Collins
En esta foto, Phil Collins utiliza el método «me tapo con la mano» para disimular su Alopecia. Seguramente a esta
altura ya no debe molestarle.
Sean Connery
No hay dudas que ahora Sean se toma la vida de otra manera. Cuando tenía cabello tenía un aspecto demasiado serio. El sexo opuesto
coincide en que es un hombre muy atractivo, incluso con su cabellera despoblada.